Nos acabábamos de apretar un cachopo cada uno entre pecho y espalda, pero allí que estábamos a las fueras de la nave de Planeta escape listos para sumergirnos en ese nuevo proyecto tan ambicioso y sofisticado que había montado la compañía Olympus.
¿Podríamos tener sueño? Sí. Pero no fue el caso. Y no gracias a la temática pero sí gracias al objetivo de la misión, que tras una correcta intro, se nos revela como un reto a conseguir. Así que tuvimos que poner a tope nuestras dotes de comunicación, así como ese toque de habilidad que no todos en el equipo tenemos 😂.
Pero bueno, avanzamos bien y a buen ritmo que es lo que importa. Hubiese molado algún giro de guion inesperado, aunque nunca llegó. También un final con más adrenalina. Pero globalmente salimos contentos de haber vivido algo distinto a lo habitual. Y encima con casi 20 minutos de sobra. ¡A partir de ahora cachopo antes de cada sala!