La verdad que empezamos la sala bastante desmotivados, principalmente por la nula inmersión inicial (es que ni un esfuerzo por parte del GM en meternos en el juego) y por el choque tan frío con la ambientación. A pesar de ello, intentamos dejar estos pensamientos a un lado y ponernos manos a la obra. Al fin y al cabo, teníamos una misión y un tiempo para conseguirla.
Como buenos escapistas profesionales que somos, no podemos dejar de intentar superar cada reto que se nos plantee (otra cosa es que luego fracasemos, pero intentarlo se intenta 😂). Así que tras encontrar a nuestro compañero desaparecido, nos pusimos a avanzar por aquel lugar, explorando estancia tras estancia hasta encontrar el 6º elemento, y de ahí a buscar la salida.
Un salida que aunque encontramos rápido nos atascamos un poco en salir. Quizás fuese que las últimas pruebas nos parecieron más aburridas o la sensación general de desmotivación, pero nos hizo falta un pequeño empujoncito para dar con la clave que ya nos permitió terminar de hilar el juego y salir victoriosos con unos 7 minutillos de margen.